Y el fin de semana llegó...

Hola a todos los lectores, se que me echabais de menos, tanto tiempo sin escribir nada, pero bueno os he dejado deberes por si acaso... ;P

Pues tal y como dice el título el fin de semana llegó y pasó muy rápido. Empecemos por el principio, el sábado por la mañana, ese día que en Barcelona destinaba a reuniones preparatorias de actividades, en Lausanne lo destino a ir al súper, algún desaprensivo durante la semana va rebajando los armarios y la nevera de provisiones, dejando bajo mínimo las existencias, es decir o iba a comprar o hacía un ayuno duradero, así que opté por lo primero. Cuando volví de comprar y ya con la nevera rebosante de comida, decidí ponerme a cocinar, así podría aprovechar la tarde. Dicho y hecho hice la comida, comí y después de un rato de estar hablando con mi familia me dirigí a una costumbre que quiero mantener e implantar fuera de nuestras fronteras (la siesta).

Una vez levantado y relajado me dispuse a aprovechar la tarde tan magnífica que lucía por estos lugares, así que me dirigí hacia información y turismo a preguntar que es lo que me ofrecía Suiza para ir a visitar, ya que tengo bastante tiempo para hacerlo, pero allí no me sacaron de dudas, me dieron unos cuantos panfletos, los cuales sólo dicen dónde te puedes gastar el dinero.

Así que me fui hacia las orillas del lago ya que con el día que hacía se tenían unas espléndidas vistas de esas montañitas que están al otro lado.

Después del ajetreo de ir para arriba y para abajo con los panfletitos, decidí coger el fabuloso transporte público para volver a mi casa, y descansar.

Al no tener nada que hacer y estar en casa, Anna me preguntó si había traído algún juego de mesa, a lo que le respondí que suficientemente había tenido con poder cerrar la maleta con la ropa que me he traído, pero como no, me acordé que en mi mochila suelo llevar las cartas y efectivamente, había traído las cartas, así que le enseñé a jugar al tute e hicimos un par de partidas. Después se me ocurrió que en Internet debería haber juegos de mesa para el ordenador y poder jugar a alguna otra cosa, así que dicho y hecho me puse a buscar y en cinco minutos encontré un juego, el trivial. Y como una holandesa y un español pueden jugar al trivial, pues fácilmente, el primer trivial para descargar que encontré fue en francés, ya nos podéis ver a una holandesa y a mí jugando al trivial respondiendo preguntas sobre literatura francesa, su historia...
Increíble, pero pasamos el resto de la tarde jugando hasta la hora de cenar, para la cual preparé una tortilla de patatas, que me quedó bastante bien, aprovechando que al día siguiente nos teníamos que llevar picnic, porque nos esperaba el Parc Aventure...

Llegamos a la estación de donde se partía hacia el parque, unos veinte minutos antes de la hora, ya que el transporte público los domingos tarda más en pasar... Al cabo de un rato empezó a llegar la gente con la que compartiría ese día, más de un tercio españoles o catalanes, aunque también había italianos y alemanes. Cuando llegamos allí comprobé que el paraíso de ardillas y castores, así que nos pusimos los arneses y después de unas nociones de seguridad ( hay dos mosquetones y diferentes cables de seguridad, para cambiar de cable, hay que cambiar primero un mosquetón y luego el otro, teniendo siempre uno en los cables de seguridad) estábamos dispuestos a la aventura, a pasar pasarelas con poca estabilidad, cuerdas flojas, lianas, tirolinas, y pasar por dentro de unos tubos teniendo que saltar de un tubo a otro... Muy divertido, y cansado, he acabado con los brazos hechos polvo, que casi no los podía levantar, pero ha merecido la pena. Una vez volvimos se acabó el fin de semana, ya que necesitaba reponer fuerzas y me pasé prácticamente durmiendo el resto de la tarde. Como no este fin de semana he visto a otro grupo escolta, parece que me persigan.

Y ya puestos hoy lunes he ido a la universidad, he hecho el curso de francés y las dos cosa más remarcables del día de hoy son que hay chocolate blanco soluble (al estilo cola cao), y he visto otra cosa poco usual por la universidad, a un chico con una boina vasca.

Y por ahora creo que ya es suficiente.